jueves, 17 de marzo de 2016

Reseña - "La heladería de Vivien y sus recetas para corazones solitarios" de Abby Clements

Título: La heladería de Vivien y sus recetas para corazones solitarios
Autor: Abby Clements
Título original: Vivien's Heavenly Ice Cream Shop
Editorial: Círculo de Lectores
Fecha de publicación: 2013 (2014 en España)
Páginas: 357
Ficha en Goodreads
Mi Puntuación:

Sinopsis:
Hace más de medio siglo que la heladería de Vivien es parte
sustancial del paisaje del paseo marítimo de Brighton. 
Pero a pesar de su encanto añejo su clientela ha ido menguando hasta niveles insostenibles.
Tras la muerte de Vivien, el destino ha dictado sentencia: serán sus nietas Imogen y Anna las encargadas de devolverle al negocio su antiguo esplendor.

Opinión personal: 
Este libro ha sido toda una sorpresa. Fue una de esas compras instintivas de "Círculo de Lectores" en un mes en el que no sabía muy bien qué elegir. Y después de cierto tiempo en la estantería por fin me animé a leerlo.

Cuenta la historia de Anna e Imogen, dos hermanas que después de heredar la heladería de su abuela Vivien no saben muy bien qué hacer con ella: seguir con el negocio familiar o venderla.

La trama del libro no podía ser más sencilla y natural. No deja de ser la descripción de la vida de dos chicas jóvenes, cada una con sus gustos y peculiaridades, y su lucha por intentar no defraudar la memoria de su abuela fallecida.

He disfrutado mucho con ambas protagonistas. Tanto Anna, la más seria y madura con una vida en pareja encarrilada; como Imogen, la alocada e impulsiva enamorada de la espontaneidad, consiguen ganarse al lector.

Con la familia marcada por el dolor a causa de la reciente pérdida de Vivien y con un negocio en horas bajas que deben sacar adelante, las dos jóvenes se entregan en cuerpo y alma para mejorar su situación.

La sencillez de su historia me ganó. Así como la lista de recetas de helados que se mencionan y que despiertan el apetito del más ingenuo y nos hacen la boca agua.
También reconozco mi fascinación con la descripción que hace la autora tanto del ambiente costero de Brighton (con su paseo marítimo) como de las playas tailandesas (y sus aguas azul turquesa). Era fácil encandilarse con cualquiera de los dos paisajes.

En resumen: no sabía demasiado bien qué esperarme de este libro y me he encontrado una bonita historia de dos hermanas que intentan sacar adelante el legado familiar en forma de heladería y que, tarde o temprano, descubren que los cambios no siempre son para mal. Aunque al principio resulten tristes o decepcionantes.


 ★★★★
 

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